Homenaje a figuras ya desaparecidas del mundo del cómic en España:...
Mucho se ha escrito sobre la ciudad de Sevilla, sobre su belleza...
Annemarie Schwarzenbach, en sus 34 años de vida realizó viajes a...
casadepoe tiene la ambición de un espejo y los contornos de un poliedro:...
En esta edición se rescata del olvido la segunda serie de apuntes para...
Entre abril y mayo de 1934, Manuel Chaves Nogales acompañará a una...
Un fugitivo vestido de sacerdote perseguido por el ejército y la policía...
En esta historieta, Mortadelo y Filemón cuentan a un personaje anónimo...
Manolo Millares, de espíritu inquieto y renovador, ha sido uno de los...
Un análisis de las medidas y alternativas que se han ido planteando...
Hélé Béji es una de las voces más audaces del mundo árabe actual. Su...
Annemarie Schwarzenbach, en sus 34 años de vida realizó viajes a...
El soldado confederado Tennessee, malherido en una de las últimas...
Celebración del formato elepé y de los gloriosos diseños de portada que...
Un grito templado en los yunques del tiempo. Una mirada de hondo calado a la vida, el amor y la muerte; tres de las preguntas, realmente esenciales, cuyas respuestas indagamos a través de la existencia.
Un poemario que discurre por la senda de la emoción, el lirismo y la transparencia, donde una estructura poética sola y un discurso significado en la sencillez expresiva.
Poemas reflexivos, pensamientos que son resultado de las vivencias propias de la autora, pero también de su mirada como testigo del mundo.
Obra de amplio espectro en la que la autora muestra su madurez lírica a lo largo de un buen número de poemas que repasan desde el dolor, la reflexión y la esperanza.
Crueldad descansa en los estragos que el paso del tiempo causa en un cuerpo cuya memoria añora joven, en una infancia que enseña sus primeras arrugas, en una penumbra incapaz de desembarazarse de su soledad, en un silencio que no llega a oírse jamás...
Si tuviera que elegir entre la memoria y el silencio, no tendría dudas: elegiría la palabra. Porque romper el papel, rasgarlo, limpiar con él las heridas abiertas, las lágrimas, dejar que suene tanto olvido, tanta desazón, tanto miedo...
Una respuesta física, una reacción del organismo ante la privación del ser amado.
Poemario en el que emoción y mirada convergen en un canto amoroso que seduce y cautiva.
Una obra cargada de experiencia vital y poética. Un debut marcado por un bagaje poético que, como lectora, ha adquirido y que, como poeta, ha sabido trasladar a su poemario.
“Permítanme que titule este prólogo con la declaración que concluía “El sexo de las locas”, del argentino Néstor Perlongher: “No queremos que nos persigan, ni que nos prendan, ni que nos discriminen, ni que nos maten, ni que nos curen, ni que nos analicen, ni que nos expliquen, ni que nos toleren, ni que nos comprendan: lo que queremos es que nos deseen”...